¡A vencer!

Hace una semana el lunes pasado, Val y yo, para Noche de Hogar, (o Noche de la Familia,) compartimos un powerpoint:

 Este es nuestro templo... pero hay cientos en la tierra... Hermana Peterson me ayudó entender esta semana acerca de los pueblos de la tierra que necesita y ampliar el espacio de "espacio sagrado". 

Entonces, eche su mente atrás a los tiempos que han necesitado ayuda y comodidad y las respuestas en tu espacio sagrado personal.

Esto sucedió en los primeros años de la iglesia.
Los refugiados fueron acamparon en congelar el tiempo, en condiciones miserables en el río Mississippi, que necesitan alivio.

Un líder impávido, una vez llamado el estadounidense Moses, recordó otros viajando, que podrían ayudar... a fue el fuego de sus convenios que los obligaron a regresar, aunque había tomado semanas en llegar a donde estaban.

 Tal vez ha tenido un poco de experiencia con descubrimiento del espacio sagrado, haciendo de promesas y trabajar para guardarlos. Tenemos.

                                                       Templo de Freiberg Alemania                         Muro de Berlín

Al igual que luchan pioneros en Alemania Oriental, quien oró y oró por un templo en su tierra. Nos dijeron por los misioneros de centro de visitante en Independence, Missouri que cuando se introduce un espacio sagrado, paredes de opresión comienzan a derrumbarse.

 ¿Cuántos de nosotros tienen nuestros propio personales paredes, que son "continuamente delante de" quien nos tiene engraven en sus manos y su corazón?

 Así, nuevos misioneros están llegando y llenando sus puestos de trabajo con luz y amor y exactitud y buen ánimo. Y nos vamos a diferentes todavía a ser experimentados horizontes. ¿Qué podemos llevar lejos con nosotros de este maravilloso espacio sagrado?

Podemos recordar el "por qué" de estos edificios de gran belleza, y por eso nos dirigimos nuestra mirada a las montañas y el cielo, de "de dónde viene nuestra ayuda". 
                                                                                                (Salmos 121:2-4)                                                                  

Volvemos nuestras mentes y corazones a los que hicieron su camino hacia adelante sin garantía, para construcción un futuro para sus hijos y las generaciones aún por nacer. Alcanzamos nuestros brazos y guardar acerca nuestro cónyuge, nuestros hijos, nietos y enseñarles acerca de sus bisabuelos.

 Y en el hacer, encontramos la comodidad, seguridad, conexión y paz. Y las heridas de nuestros desafíos cada día encuentran bálsamo y bendición a la luz verdaderas y sólidas promesas.

Nuestra experiencia en Tegucigalpa  nos ha cambiado para siempre.

Gracias por su patiencia

, apoyo, oraciones, y su maravillosa capacidad de avance con su carro, carreta, o simplemente los pies, zapatos, o no zapatos--"a vencer, a vencer, a vencer!" 

Bendiciones a cada uno de ustedes... y manténgase sintonizado para más aventuras! 
Amor, Laurene y Val